lunes, 19 de febrero de 2018

Turbantes en la década de 1940.

No son sombreros en si, pero también los grandes sombrereros se implicaron en el diseño de estos accesorios y nos dejaron auténticas obras de arte. Muchos de ellos se encuentran hoy en los mejores museos.
El turbante comenzó su aparición en 1936, y poco a poco se subieron a las cabezas de muchas de las mujeres de la década de 1940.
Hasta la revista Vogue lo llevó a sus portadas, y le coronó como uno de los accesorios favoritos de las mujeres.
Los turbantes iban desde los mas sencillos, que eran una pieza de tela larga, que se anudaba en la parte superior de la frente, volviendose hacia la parte posterior, a otros mucho más complejos.
Hasta algunos, mezcla entre el sombrero y el turbante.
Los turbantes podían ser desde alta costura, al complemento mas barato imaginable para poner en la cabeza, para aquellas mujeres que no tenían una economía boyante.

Gracias a los turbantes se disimulaba la suciedad en  los cabellos, que en muchos casos era debida a la escasez de agua en algunas ciudades.
Se realizaron en todo tipo de materiales, dependiendo de su uso. Para el trabajo se usó el algodón o el rayón. Para fiesta, el terciopelo, la seda, y también el rayón que servía para todo.
Fueron numerosas las actrices que se unieron a la moda de los turbantes, entre otras María Montez. 
Abajo Joan Crawford en 1939
Diseñadoras como Coco Chanel también jugó a favor de corriente.
 Les dejo algunos otros modelos de turbantes , la mayoría de ellos, de inspiración oriental.
Abajo, turbante de Sally Victor, de 1941
Curiosamente, buscando imágenes de turbantes de la década de los 40, han aparecido muchos actuales, y les puedo asegurar que muchos de los antiguos me resultan tan modernos y actuales que podrían pasar perfectamente por turbantes del s. XXI
.Espero que esta mirada atrás les haya resultado grata.
Hasta la próxima.










jueves, 8 de febrero de 2018

Los primeros sombreros del 2018

Estos días de atrás he encontrado en el rastro un puesto con muchos sombreros, restos de una sombrerería que ha cerrado, o esa al menos ha sido la explicación del vendedor.
Al pasar la primera vez no habían sacado la mercancía, pero me llaman y me avisan, pues saben, por otras ocasiones, que me gustan los sombreros.
(La verdad es que el color que sale en las fotografías es muy ácido, y en la realidad es un rojo normal).
A la vuelta ya habían vendido muchos, vi como una pareja se llevaba una caja de buen tamaño llena, supongo que unos 20-30, al menos.
Los que cogí son todos de paño, varios en negro, uno en azul y otro en rojo.
La verdad es que el precio ha sido increible, cinco euros cada uno. no tengo ni idea de cuanto podrían valer en la tienda, pero seguro que cinco veces más, por lo menos.
Uno de ellos, que lo compré aparte, en otro sitio, no llegó a un euro.
Este rojo tiene muy poco fondo en la copa. Me recuerda algunos modelos de los años 40 o 50.
No quiero quedarme con el tema del precio, quiero quedarme con los modelos, con las formas.
Tanto el rojo, como este, tienen un refuerzo en el borde del ala, que hace que mantengan mejor la forma y no se caiga el ala. 
No compré ninguno tipo fedora, y si los había, pero el año pasado compré varios en negro, y alguno está todavía sin estrenar.
En este caso tiene etiqueta, cosa que no sucede en todos.
Este es un sombrero atemporal, y he buscado algunas imágenes que me recordaran a esta forma. Las primeras que he encontrado son de los años 70.
Y en color blanco, pero con la misma forma.
En la próxima les enseñaré el resto de los que entraron en la compra.